Debo decir que si hay algo que me molesta es su cara. No, no pretendo ser hijueputa, solo que siento asco al verlo. Le explico antes de que me juzgue, después ni picha.
Todo comenzó cuando decidí que fuera mi confidente y compañero... creo que comenzó antes, cuando me comenzó a importar.
Era tan simple como que el resto del mundo se diera cuenta de lo que yo había descubierto años atrás: usted estaba destinado a brillar. Pero en este mundito estúpido, en el que usted tiene dos opciones de vida: dejarse llevar por los afanes que hay detrás del escenario o compartir la vida con la cámara en mano.
Hay una gran tentación en la primera. Se ríe más, las cosas se olvidan más rápido y todo es más rápido; muy más para ser cierto, en un "muy más" se convirtió usted.
En la segunda hay mucha realidad, mucho que compartir y mucho más que caminar. Viendo su asquerosa forma de dar la cara y la hipocresía que rebosa de cada cagada que a su vez representan las sonrisas que "regala", es que era "mucho" para usted.
Todo comenzó cuando usted era un ejemplo, una compañía... creo que comenzó antes, cuando era inocente.
Pero la inocencia mental y de alma se pierde, como la mayoría pierden la virginidad, en un acto que quiera o no se planifica, pero al final de cuentas duele en puta a alguno de los dos por la falta de experiencia previa.
A la mierda toda esas palabras que alguna vez me hicieron creer que teníamos una cercana y muy atenta simpatía por las mismas creencias y metas, que nos acompañaríamos aunque las cosas no sucedieran como lo esperábamos.
Todo terminó cuando me dio una patada en el culo (y a otras más personas), así porque así, cuando su alrededor (al que yo no era ajena pero si lejana) se convirtió en la tentación y su "nuevo yo" un despojo desgraciado.
Al final de cuentas es un montón de cosas que nadie dice, como las malas palabras.
Todo comenzó cuando decidí que fuera mi confidente y compañero... creo que comenzó antes, cuando me comenzó a importar.
Era tan simple como que el resto del mundo se diera cuenta de lo que yo había descubierto años atrás: usted estaba destinado a brillar. Pero en este mundito estúpido, en el que usted tiene dos opciones de vida: dejarse llevar por los afanes que hay detrás del escenario o compartir la vida con la cámara en mano.
Hay una gran tentación en la primera. Se ríe más, las cosas se olvidan más rápido y todo es más rápido; muy más para ser cierto, en un "muy más" se convirtió usted.
En la segunda hay mucha realidad, mucho que compartir y mucho más que caminar. Viendo su asquerosa forma de dar la cara y la hipocresía que rebosa de cada cagada que a su vez representan las sonrisas que "regala", es que era "mucho" para usted.
Todo comenzó cuando usted era un ejemplo, una compañía... creo que comenzó antes, cuando era inocente.
Pero la inocencia mental y de alma se pierde, como la mayoría pierden la virginidad, en un acto que quiera o no se planifica, pero al final de cuentas duele en puta a alguno de los dos por la falta de experiencia previa.
A la mierda toda esas palabras que alguna vez me hicieron creer que teníamos una cercana y muy atenta simpatía por las mismas creencias y metas, que nos acompañaríamos aunque las cosas no sucedieran como lo esperábamos.
Todo terminó cuando me dio una patada en el culo (y a otras más personas), así porque así, cuando su alrededor (al que yo no era ajena pero si lejana) se convirtió en la tentación y su "nuevo yo" un despojo desgraciado.
Al final de cuentas es un montón de cosas que nadie dice, como las malas palabras.
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