Ir al contenido principal

Mujer de un solo amante

Como todas las mujeres ella tenía su propia aventura; ese hombre en el cual satisfacía sus deseos de cuando en cuando y se escondían ante una sociedad que se suponía todo.
Cuatro años habían pasado ya dejándose y perteneciéndose, cada cual con su pareja o se turnaban la idea de compromisos, pero mantenían entre ambos el placer de lo prohibido.
- Conocí a alguien- se lo dijo con la sonrisa curiosa que siempre la caracterizó.
- ¿Ahora de quién te enamoraste?
- Aún no me acostumbro a que tus respuestas sean siempre preguntas. De un hombre, pues- algo sarcástica.
-¿Y él lo sabe?
- Saldremos esta noche.
Él la tomó por su cintura, besó su delgado abdomen y no dudó en besarle los labios escondidos para otra gente, como si fuese la primera vez que lo hacía.
Llegada la noche Ana se alistó y decidió pasar por costumbre lo que le emocionó la tarde. La salida se convirtió en tiempo juntos y sin más ni más pasó a llamarse prometido.
- Dejaste de ser mía -
- Siempre lo seré, aunque nunca te animarás a ponerme un anillo en el dedo. Él solo se atrevió a hacer lo que no quisiste vos, Edgar.
- ¿Te dio un anillo?
El futuro marido, para sorpresa del amante y de la misma Ana, resultó ser un hombre de esos a los que toda mujer explica como "él hombre". Era refinado, bueno y con la inteligencia que alimentaba la chispa que poseía todo un caballero.
- Quiero ser tu amante - abrazando sus muslos en la cama.
- Pero sos mi pareja, ¿para qué querés ser mi amante?
- Aprendí a ser tu pareja para ser tu amante.
No tuvo mucho que decir para que ella lo aceptara como su aventura, un juego con permiso pero suyo.
Algunos meses después el nombre de Edgar apareció en su teléfono. Ana accedió a verlo, no tenía nada que perder.
- Necesitaba verte-
- Tenia tiempo de no llamarme, ¿no? Mucho tiempo de no necesitarnos.
- ¿Ahora me respondés con preguntas?
- Olvídese de la ironía ¿Para qué me llamó?
- Siempre te necesito ¿qué ha hecho contigo?
- Me lo dio todo. Me dejó ser todo.
 Tomó la mano que mantenía un anillo, ahora sin perla para besarla lentamente. Ana quitó su mano con un gesto de desagrado.
- ¿Te divertís con él?
- Usted sigue con la maña de preguntarme cosas. Deje de hacerlo, no vine a restregarle mi nueva vida.
- Vos dejá de hablar en usted. Si querés que me calle volveme a besar.
- No quiero, ya no debés saber a nada.
- Olvidé lo que me provocaba que me hablaras en vos. Vamos a la cama.
Ella sonríe como recordando las veces en que una cama los acompañó y que eran fácilmente sustituibles por el carro, la baño o el escritorio.
- Sabés que soy leal.
- Me traicionaste a mí.
- Vos lo sabías, soy mujer de un solo amante.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Los amigos no existen

Hoy quiero recordar lo que ha sido la amistad en mi vida. La verdad con todo lo sucedido podría decir que la amistad no existe, no me mal juzguen, es solo de ver los hechos: Una vez en la que dos "amigas" te socaban los estudios, las diversiones y aquello que atesoras. Un "amigo" que te utilizó para crecer y luego cuando era la hora de ayudar a crecer se fue. Un "amigo" que te apoya para enamorarte y luego te repudia. Una "amiga" que te olvida aún después de apoyarla desde niña. Una "amiga" por la que se dio todo, se confió lo más mínimo y te traicionó quitandote algo amado, aquello por lo que te engañó y te humilló. Unas "amigas" que te apoyan y luego se vuelven para hablar mal sobre ti. Un "amigo" que te recuerda cuando te pasa algo malo para criticarte. Un "amigo", novio de tu amiga que solo te quería para engañarla y como no lo logró la alejó de ti. Un "amigo" que solo quería sexo y

El "awww" masculino

La mayoría de mis amistades son hombres, por lo tanto ser tierna con ellos no me es un problema, bueno a veces es complicado: o se confunden, o los que me gustaría que se confundieran me convierten en su "mejor amiga" pero ese es cuento de otro post; este habla de las reacciones masculinas ante la ternura por chat o mensaje de texto. Antes Ella - Sos un lindo, alguien único para mí Él R1: -Eh, gracias. R2: - (Silencio) Viste que chiva lo que trajo aquel mae Ella: - (Piensa) Nadie me tiene siendo linda Ahora Ella: - Sos un lindo, alguien único para mí Él: R única: - Awwwww , gracias. (a veces incluyen un "que linda") Ella: - ^.^ (o :) , =) , *.* , o cualquien otra carita que signifique que cosi) Viste que chiva la vez pasada... Ese "Aww" cambió la conversación: ya tenemos una respuesta a la ternura que expresamos las mujeres, pero ¿qué significa? Puede ser que asientan positivamente a la expresión o tal vez la respuesta

Sueños nada pomposos

Ser de esas mujeres que aún no están seguras si pertenecen a este siglo o al anterior, entre la independencia y lo popularmente llamado tradicional, como si decirles en la misma frase tuviese síntoma de infamia. Mis sueños son simples, nada muy pomposo, una total injusticia para quienes consideran que si un sueño no es extraordinario no puede llamarse sueño. Pienso en un espacio propio, que pueda decorar de mil formas al año, con una cocina llena de los juguetes necesarios para satisfacer mi manía por cocinar y sonreír al hacerlo. Tomar el auto y conducir a nuevas historias, que duren una tarde, dos días o alguna semana. Un pasaporte con al menos un sello al año, para dejar de pensar que mi realidad es la única. Quiero escribir un libro o dos... Sueño nada original para una periodista, pero algo innovador para una productora. Un título más en la repisa, que signifique la puerta para ayudar a otros desde un lugar donde mis decisiones sean tomadas en cuenta. Y algún día, cumplir e